Crítica: En la mente del asesino de Rob Cohen

Cuando terminó la serie Perdidos, el actor Matthew Fox tomó la decisión de alejarse un tiempo de la gran pantalla y darle un giro a su carrera, en este tiempo en el que ya no da vida a Jack Shepard ha hecho teatro y ha protagonizado esta película en donde encarna a un peligroso asesino a sueldo al que le gusta dejar en el escenario de sus matanzas dibujos imitando el estilo de Picasso. Es notable la transformación física que ha pasado el actor, ha tenido que perder 18 kilos para interpretar a un personaje bastante diferente al que le ha hecho famoso. Crea un personaje demasiado extremo y no tiene ningún tipo de control, demasiado loco y más que miedo da pena. Pero en realidad el protagonista de la historia es el investigador y psicólogo Alex Cross. El personaje basado en las novelas de James Paterson ya fue adaptado al cine en las películas El coleccionista de amantes y La hora de la araña. La historia no es muy original, la búsqueda de un asesino por parte de una pareja de policías, al desconocido Tyler Perry le acompaña Edward Burns que como director de cine prometía mucho y ahora se le ve más como secundario en películas como esta. Con una historia aburrida y sin sorpresas, personajes masculinos planos, los femeninos son simples floreros, actores en su peor momento hacen que esta sea de las opciones menos interesantes a la hora de ir al cine.

En la mente del asesino se ha estrenado hoy viernes