Después de que todo lo que haya podido ir mal haya ido peor, llega a
los cines Guerra Mundial Z. Marc Foster dirige esta ¿adaptación? de la novela
homónima de la que sólo conserva el nombre. No hay nada en esta película que
recuerde al libro, esos momentos épicos como La batalla de Yonkers, o
personajes carismáticos como Kondo Tatsumi o Sensei Tomonaga Ijiro. Tampoco hay
intriga por saber quién morirá, ya que los secundarios son tan planos e
irrelevantes que nos da igual lo que les pase, y Brad Pitt… Pues bueno, entre
el anuncio de las secuelas y que es casi un súper hombre, sabemos que saldrá
intacto desde el minuto uno ya sea por méritos propios o suerte -mucho más de
lo último-. Otra cosa que se echa de menos es pasar algo de miedo, ya que las
hordas de zombis están demasiado nutridas y eso impide diferenciar gran cosa, y
cuando los zombis salen en poco número, son ridículos. Así, sin más.
Pero uno de los peores lastres de la película es que, tras el asombro
de ver los primeros ataques zombis, aburre. Esto puede deberse a que hay partes
que no sirven para que avance la poca historia que hay, o a la reescritura del
guión, a todo lo que tuvo que rodarse por la duración del montaje original, o…
Los actores están correctos, sin más. Mireille Enos hace de madre
florero/sufridora que espera a que su marido vuelva sano y salvo con más bien
poca repercusión, incluso molestando. Los actores que interpretan a los militares
hacen de tíos duros y ya, no aportando nada a sus personajes. Aunque les daré
un voto de confianza porque poco hay que aportar a unos personajes tan sosos y
planos. Incluso Brad Pitt, estrella indiscutible de la película, está soso. Un
buen reparto completamente desaprovechado.
Sin embargo, Marc Foster hace su trabajo de maravilla. Este hombre
sabe cómo gastar millones y millones de dólares y hacer que quede visualmente
bonito. Poco más que añadir al apartado técnico de una película con
190.000.000$ de presupuesto.
¿Lo que más me ha gustado de Guerra Mundial Z? Que Brad Pitt viniese
en persona a presentarla. Ah, y que hayan usado dos de las mejores canciones de
Muse para la banda sonora.
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