Olivier Nakache y Eric
Toledano son dos directores que cuentan historias muy cercanas sobre las
dificultades de la vida pero desde un punto de vista muy personal. No se regocijan
en las tragedias de los personajes sino que ponen un punto de optimismo y de
esperanza en la oscuridad en la que viven. Si en Intocable nos hablaban de la
fuerza de un hombre que apenas podía moverse y cómo un inmigrante le ayudaba a
buscar motivos para vivir y en Samba hablaba de los problemas de los
inmigrantes en Especiales habla de las personas que padecen enfermedades
mentales o tienen algún tipo de discapacidad pero que no encuentran amparo en
el estado ya que son casos que son considerados irrecuperables. A través de una
asociación que hace todo lo posible con los recursos que tiene vemos la vida de
esta gente.
Son personas que tienen
dificultades para relacionarse con los demás y para entrar en el mundo laboral
pero con una ayuda, mucha comprensión y paciencia lo pueden conseguir y tener
una vida más o menos normal. Cuando las instituciones no llegan tiene que ser
iniciativas particulares las que suplan estas carencias. La película no da una
visión azucarada de la realidad ni trata de mostrarnos las cosas desde una
falsa visión demasiado utópica. Buscan contarnos lo que pasa y las dificultades
del mundo pero siempre con la esperanza de que puede mejorar, de que todo
acabará yendo bien. Que de la tragedia de los personajes se pueda sacar humor y
comedia hizo que la gente acudiera en masa a ver una película como Intocable.
En Especiales pasa algo parecido. En esta ocasión no se cuenta una historia sino
la de muchos que tienen a Bruno y a Malik como únicos soportes.
El protagonista de la
película es Vicent Cassel, uno de los grandes actores que han venido de Francia
en un personaje completamente distinto a los que nos tiene acostumbrados. Siempre
ha hecho personajes extremos, duros y violentos, siempre ha sido el malo de la
función y aquí es el héroe que aporta su cara más amable. De seductor que las
conquista a todas pasa a ser alguien que no se sabe relacionar con las mujeres.
Los directores ya habían hecho algo parecido en Samba al darle un nuevo
registro a Charlotte Gainsbourg en Samba.
La película es emotiva y
divertida. Si te ha gustado Intocable, Especiales también te va a convencer.
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